“El juego, es el primer instrumento que
posee el niño para aprender y para conocerse. El desarrollo de esta actividad
ayuda al niño a saber cómo se desempeña él ante nuevas acciones, descubre cómo
es su forma de actuar y de interactuar con los demás.”
“El juego es un derecho del niño”.
En los
encuentros que tuvimos con los papás con motivo de la celebración de la
Independencia, escuchamos a los papás hablar de los juegos que hacían cuando
eran niños. Nos contaron que jugaban a la soga, con las muñecas y con los
autitos, a la rayuela, al elástico, a la payana, a las escondidas, a la mancha,
a la brujita de los colores y también, a bailar y cantar.
A muchos de estos juegos los conocemos, pero no los jugamos con frecuencia. Ahora
nos atraen otros juegos que
tienen que ver con la tecnología y algunas veces nos pasamos muchas horas frente a una computadora
o frente a la Play Station jugando.
La
escuela es un lugar genial para jugar y divertirnos pero a veces lo hacemos de
una manera en la que el espacio físico y la cantidad de chicos que somos, no resulta segura.
Es por esto que los delegados de cada grado
tuvieron una entrevista con los directivos para pensar en nuevos juegos y como
resultado, ahora los recreos tienen una nueva organización. Analizamos con
la señora Susana que antes de implementar las nuevas reglas, los recreos no
eran tranquilos ya que corríamos y así nos podíamos lastimar y además molestábamos a los grados de la secundaria
que están sobre el pasillo del patio.
Ahora, en los sectores que están marcados con un círculo rojo, está prohibido jugar, por ejemplo: en las
galerías, en el último escalón de las
gradas, en la entrada y en los
baños. Podemos jugar calmados en el comedor con los juegos de mesa
que están dentro de una caja. Además hay dibujadas en el patio rayuelas, también una alfombra para jugar a las bolitas
y con los autitos, y…. ¡ pronto habrá más juegos!
Luego de
terminar los recreos los grados se turnan para limpiar el patio antes de
subir.
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